Si todos los meses estás haciendo malabares para pagar tus facturas, cumplir con los gastos del hogar y no estás destinando una parte de tus ingresos para ahorrar, claramente hay un desequilibrio en la forma en la que estás llevando tus finanzas personales.
Sin embargo, no hay de qué preocuparse, porque en este artículo te presentaremos cinco tips de ahorro que podrás empezar a aplicar desde hoy mismo para cuidar tus finanzas personales e iniciar un plan de ahorros que te ayudará a cumplir tus metas a mediano y largo plazo.
Primero, fíjate en qué estás gastando tu dinero: Aunque parece una obviedad, muchas veces perdemos el rastro de cuáles son las cuentas que estamos pagando mes a mes, por lo que podemos terminar gastando dinero en servicios que dejamos de usar hace mucho tiempo, pero que siguen sacando un porcentaje de nuestros ingresos mensuales. Para hacerlo, revisa en detalle los movimientos de tus cuentas bancarias en el último mes, seguramente te encontrarás con el pago de alguna suscripción a un servicio que ni siquiera recordabas que existía.
Optimiza tus gastos, no compres de sobra: Este punto se puede replicar en todos los egresos que tengas mensualmente, no importa si se trata de tu suscripción a Netflix, el plan de datos de tu teléfono celular o el paquete de televisión, internet y telefonía que tienes contratado para tu hogar. Aplica para todo. Así pues, pregúntate: si siempre vas a la misma sede de tu gimnasio, ¿de qué te sirve pagar de más por la suscripción que te permite acceder a todas sus sucursales? Ahora plantéate la misma cuestión para el servicio de streaming de tu preferencia: ¿para qué pagar por el plan que te permite ver series en 5 pantallas en simultáneo cuando tu cuenta solo la usan dos personas? Luego de resolver estas dudas, fíjate en cuáles de los servicios que ya tienes contratados puedes optar por una solución más económica, o si definitivamente no los usas hace un buen tiempo, aplica el punto anterior y cancélalos por completo.
Automatiza el pago de tus deudas: ahora que has hecho una revisión de las facturas que pagas mensualmente, te has deshecho de las que no necesitabas y has optimizado las que decidiste mantener, es el momento de ahorrar al máximo en su pago. Y es que una misma factura puede tener un valor u otro dependiendo de cuándo la pagues, y obviamente siempre querrás gastar lo menos que puedas en cumplir con tus obligaciones financieras. Para ello, una estrategia que podrías aplicar es la automatización del pago de tus facturas. De esta manera, y dependiendo de sus fechas de vencimiento, podrás programar tu cuenta de ahorros para que de ella se debiten a medida que avancen los días del mes los valores de tus facturas, siempre fijándote que cuando programes su pago cuentes con fondos suficientes para hacerlo (es decir, se hagan luego de que te haya sido consignado el sueldo de tu empresa) y que la fecha para las que planees pagarlas no exceda el límite que establezca la factura, lo que conllevaría un recargo por su vencimiento. Hoy en día, puedes automatizar el pago de prácticamente todas las cuentas que tengas pendientes, desde la de los servicios públicos hasta la de tu factura del celular. Si no sabes cómo hacerlo, haz una búsqueda en el sitio web de tu corresponsal bancario o comunícate con su línea de atención al cliente, seguro te asesorarán para que logres programar tus pagos en cuestión de minutos.
Evita los gastos hormiga: la solución para evitar los gastos hormiga es salir de casa con todo lo que necesitas para afrontar el día. Pero, ¿cuáles son estos gastos? Son aquellos que sin ser de una cuantía significativa, por la recurrencia que tienen en nuestro día a día pueden terminar sumando una cantidad considerable a final de mes. Además, son gastos completamente evitables, como se podría considerar un café que compramos frecuentemente de camino al trabajo, un pedido a domicilio en lugar de preparar nuestros propios alimentos o incluso usar un medio de transporte más costoso que otro que cumpliría la misma finalidad por menor precio. Para evitar estos gastos, es fundamental ser consciente de ellos, y las alternativas que podemos implementar para ahorrarnos esos pesos de más que gastamos en ellos cada mes.
Usa efectivo cada vez que puedas, y págate a ti mismo: aunque para algunos parezca ortodoxo, el uso del dinero en efectivo es una de las maneras más sencillas de ser conscientes de lo que estamos gastando. Cuando pasamos la tarjeta de crédito, tenemos la sensación de que la compra que acabamos de hacer no tendrá un gran impacto en nuestras finanzas, pues de todas formas contaremos con bastante tiempo para pagarla dependiendo de las cuotas a las que hayamos elegido diferirla. Con el efectivo, por el contrario, cada vez que hacemos una compra tenemos menos recursos en nuestra billetera, lo que nos hace pensárnoslo dos veces antes de incurrir en un gasto evitable.
En cuanto a la segunda parte de este consejo para tus finanzas personales, es tan sencillo como suena: una vez recibas el pago de tu sueldo, deja intacto lo que sabes que necesitarás para pagar tus cuentas, destina un porcentaje al ahorro y “págate” a ti una parte que podrás destinar a lo que quieras. De allí saldrá el dinero que te recomendamos usar en efectivo en el día a día, bien sea para pagar una cena, salida a cine o lo que quieras.
Ahora que conoces estos cinco consejos para cuidar tus finanzas personales, te invitamos a implementarlos desde hoy mismo. ¡Seguramente empezarás a ver sus resultados desde la próxima quincena!