Como cualquier otro objetivo el primer paso siempre es proyectarlo. Sin duda todos anhelamos tener nuestro hogar, pero antes de soñar con el momento de recorrer los pasillos del apartamento, disfrutar de la vista del balcón y la diversión en las zonas comunes hay que tener el bolsillo organizado.
Este no es un artículo que te dará las respuestas que estás buscando, pero queremos contarte con esta práctica guía lo que comúnmente le ha funcionado a muchos soñadores como tú.
Aquí hablaremos mucho del famoso Score Financiero, tenerlo a tu favor será el secreto fundamental para poder abrir las puertas de tu hogar.
En 0 lo antes posible
Es extraño decir que para ahorrar hay que pagar, pero en este caso es fundamental identificar qué es lo que no permite engordar tu cuenta.
Si tienes tarjetas de crédito, deudas con tiendas o “culebras”, haz todo lo posible para salir de este tipo de obligaciones. Así vas a mejorar tu historial crediticio, tendrás más presupuesto a tu favor y podrás proyectar un presupuesto fijo para pagar la cuota de tu apartamento.
No más ‘gusticos’ culposos
Aquí es importante aplicar la ley de austeridad, créenos que en un futuro valdrá más que la pena. La mejor forma de ahorrar es tener un objetivo claro y sacrificar temporalmente cualquier cosa que se interponga en tu ahorro.
Puede que al principio se haga complicado, pero cuando veas lo resultados y tu cuenta creciendo, te agradará la idea de preparar más comida en casa o quedarte los fines de semana haciendo maratón de películas.
50 | 30 | 20
No permitas que tus gastos fijos sean superiores a la mitad de tus ingresos. Aplica los consejos que mencionamos antes para organizar tu presupuesto.
- El 50% de tus ingresos deben ser para las obligaciones que tendrás mensualmente, como deudas, alimentación y las necesidades de tu casa.
- El 30% lo puedes aplicar para gastos variables, pero es importante darle un límite a estos.
- Finalmente, pero no menos importante, el 20% debe ser para ahorrar. Fíjate metas y cúmplelas como si fuera la obligación más importante. Si puedes incrementar este porcentaje de ahorro ¡Mucho mejor!, así llegarás más rápido a la meta.
La ayuda silenciosa
Recuerda que tus primas y cesantías deben ser tu impulso para conseguir grandes objetivos, como el hogar con el que sueñas. Destina la totalidad de la prima para el ahorro que necesitas antes de invertir o directamente como contribución al pago de las cuotas mensuales.
Si vas a retirar las cesantías, estas las debes destinar a tu hogar esto para el pago, así será menor el valor de la financiación con el banco y por ende los intereses.
¡Claro que es posible!
No te dejes abrumar como si fuera una meta inalcanzable. Recuerda que el proceso se hará cada vez más fácil mientras más vayas avanzando. Para que tengas un lugar para inspirarte, queremos recomendarte proyectos con excelente valorización y llenos de bienestar. Conócelos aquí.